jueves, 26 de noviembre de 2009

Sanz lleva su Paraíso Express a Madrid


El cantante supo mezclar, junto con un buen puñado de canciones, para ofrecer un buen concierto a los espectadores que abarrotaron el Teatro Compac de la capital española

El cantante español Alejandro Sanz actuó anoche en el Teatro Compac de Madrid, donde unos mil espectadores abarrotaron el recinto elegido por el artista para dar a conocer las canciones de su nuevo disco, "Paraíso Express".
Un público entregado, un ambiente recogido y un escenario coqueto son los tres ingredientes que Alejandro Sanz supo mezclar, junto con un buen puñado de canciones, para ofrecer un buen concierto a los espectadores que abarrotaron el recinto madrileño.

Un reestreno soñado para Sanz, que después de un divorcio, un intento de chantaje y el estrés que le provocó su última gira, ha regresado al escenario en buena forma, dispuesto a defender su estatus entre los artistas españoles de mayor talla internacional.

De momento, esa privilegiada situación no parece que vaya a sufrir revés alguno, ya que "Paraíso Express", tras dos semanas en el mercado, ha alcanzado el número uno en las listas musicales de varios países y en España ha obtenido un Disco de Platino gracias a las 60 mil copias vendidas.

Las actuaciones del cantante, por otro lado, también gozan de una excelente salud, como quedó demostrado cuando el pasado 22 de noviembre, en apenas una hora, se agotaron las localidades para los ocho conciertos que el artista ha programado en el Teatro Compac, con unos precios que oscilan entre los 90 y los 240 dólares.

Alejandro Sanz subió a las tablas y ahí estaban, como si no hubiera pasado el tiempo, la risa pícara, el acento andaluz, la timidez, los rasgos que, en definitiva, le han convertido en icono sexual para un par de generaciones de féminas de todo el mundo.

Cuando las luces se encendieron, el escenario quedó iluminado, mil gargantas enfebrecidas corearon su nombre al unísono y Sanz, emocionado, no pudo por menos que decir "gracias" ante las muestras de cariño de su público, continuas durante las dos horas que duró el espectáculo.

La velada arrancó al ritmo de "Peter punk", canción que también abre su nuevo disco y con la que Sanz dio la bienvenida a todos los presentes en el teatro, incluidos rostros tan conocidos como Miguel Bosé, Ana Torroja, Leonor Watling o la pareja formada por el tenista Carlos Moyá y la actriz Carolina Cerezuela.

Los problemas con el sonido de los instrumentos, que no permitían escuchar con nitidez la voz del cantante, caracterizaron los primeros compases del concierto, que enlazó temas como "Lo que fui es lo que soy", "Desde cuándo" o ese "Viviendo deprisa" con el que Alejandro Sanz se dio a conocer en 1991.

El respetable no resistió el impulso de bailar al son de "Corazón partío", la pieza que en 1997 encumbró a Sanz como artista de masas y que esta noche ha sacado a relucir el lado más flamenco del cantante.

Para entonces, los problemas técnicos ya se habían solucionado, abriéndose la puerta al mejor tramo de un recital que continuó con "Cuando nadie me ve", "Si hay Dios" y "Lola soledad", una canción que Alejandro Sanz dedicó "a todas las mujeres" en el "Día internacional contra la violencia de género".

El clímax de la actuación llegó con "No es lo mismo", una avalancha rítmica irresistible que, sin embargo, dejó un regusto amargo, ya que Sanz alargó su final para presentar a los miembros de su banda y la canción perdió gran parte de la fuerza con la que había sido interpretada.

El cantante comenzó a preparar el fin de la velada con el single de su nuevo trabajo, "Paraíso Express", al que siguieron "Lo ves" y "Tú no tienes la culpa".

"Si tuviera que elegir un paraíso en el que estar ahora mismo, sería éste, sin duda", aseguró el artista a modo de despedida.

Alejandro Sanz ofrecerá otros siete conciertos en el Teatro Compac de Madrid hasta mediados del próximo mes, antes de comenzar una gira mundial que aún no tiene fechas programadas.
Madrid, España

No hay comentarios:

Publicar un comentario