jueves, 21 de mayo de 2009

Buenos Aires recibirá obra teatral para espectadores desnudos

Durante la presentación de este viernes de Bernarda Alba al desnudo, los asistentes deberán quitarse la ropa

Un grupo de actores argentinos interpretará este viernes Bernarda Alba al desnudo, una adaptación de la obra de Federico García Lorca, en una sala de Buenos Aires a la que sólo podrán entrar espectadores que se animen a quitarse toda la ropa.
El público podrá llegar vestido al teatro Arlequino de la capital argentina, pero antes de acceder a la sala deberá pasar por una habitación donde se quitarán todas sus prendas para cumplir con la condición de desnudo obligatorio que proponen los organizadores.
La obra, interpretada por actores que en su mayoría también aparecerán desnudos, estará vedada para la prensa o para quienes incumplan con el requisito de desvestirse.
"Es que si dejamos que entren con ropa se nos llenaría la sala de curiosos", explicó José, un profesor de anatomía que no quiso revelar su apellido y es el autor de la propuesta junto a Guillermo, su socio en la productora Studiodos.
El "primer evento cultural nudista", tal como fue llamado por sus organizadores, podrá ser visto por un máximo de 120 espectadores, la capacidad de la sala.
Los espectadores sólo podrán dejarse puesto el calzado "para evitar que cunda el frío", aunque "hay buena calefacción", según apuntó José.
"Queremos producir quincenalmente un evento nudista", contó el creador de Studiodos, que también realiza un programa de radio para nudistas.
Bernarda Alba al desnudo es una adaptación de La casa de Bernarda Alba, la obra de Federico García Lorca, y está dirigida por Germán Akis y Raúl Baroni.
La obra está en cartel desde hace dos años en el teatro porteño Arlequino, pero se trata de la primera vez que está destinada a público nudista.
"Después de la obra va a haber un brindis y el público va a poder hablar con los actores. Es una buena oportunidad para que puedan encontrarse en un evento distinto a los típicos" para nudistas, destacó José. Buenos Aires, Argentina. EFE (El Universal)

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